31 diciembre 2010 (3) Telecinco

31 desembre 2010 (3)

També les televisions van presentar el treball de investigació d'en Robert com el mes complert realitzat fins al moment. Podem donar proves de la gran quantitat de hores que va invertir en localitzar tota la informació perquè, fins i tot, alguns de nosaltres várem donar-li tot l'ajut que ens va demanar.

Desprès de tants anys en els que ell ens ha ajudat no podiem dir-li que no.

La informació prové de TeleCinco.

Las bandas terroristas han matado a 121 catalanes en cuatro décadas

Las organizaciones terroristas han matado en las últimas cuatro décadas a 121 catalanes, según recoge el primer estudio efectuado sobre el impacto del terrorismo en Cataluña, donde 23 bandas terroristas han cometido en cuarenta años más de 300 atentados.

Así se recoge en un informe elaborado por el coordinador del Servicio de Información y Orientación a las Víctimas del Terrorismo en Cataluña, Robert Manrique, que ha recopilado todos los atentados con víctimas mortales ocurridos en Cataluña desde 1970, así como los atentados en el resto de España o en el extranjero en el que también han fallecido catalanes.

Manrique, que resultó herido en el atentado de Hipercor del 19 de junio de 1987 -el más sanguinario cometido por ETA, con 21 víctimas mortales-, ha explicado hoy en rueda de prensa que a la hora de elaborar este estudio, que aparece publicado en la revista del Sindicato de Policía de Cataluña (SPC), ha descubierto atentados que habían caído en el olvido, perpetrados por organizaciones de distinta índole.

En total, desde que en 1970 el Front d'Alliberament de Catalunya (FAC) atentó contra la sede de Radio Nacional de España en su antigua sede del céntrico paseo de Gràcia -en lo que se considera el primer atentado terrorista del que se tiene constancia en Cataluña-, un total de 121 catalanes han fallecido víctimas del terrorismo.

De todas las víctimas, 68 son civiles -incluidos nueve catalanes que fueron asesinados en Zaragoza y ocho que murieron en atentados cometidos en Marruecos y Yemen-; 17 son Guardia Civiles -uno falleció en Euskadi y otro en Madrid-; 15 son policías nacionales -uno murió en Euskadi-; nueve son militares -uno de ellos era un soldado americano que falleció en Cataluña-; seis son agentes de la policía armada -que pasó a denominarse Policía Nacional en 1978-; tres son vigilantes jurados; dos son policías municipales y uno es Mosso d'Esquadra.

Según Manrique, el 'ránking macabro' de organizaciones con más víctimas mortales a sus espaldas lo encabeza ETA -con atentados como el de Hipercor, el de la casa cuartel de Vic, en el que fallecieron diez personas, o el del ex ministro Ernest Lluch-, seguida por el Grapo, Terra Lliure y un sinfín de pequeñas organizaciones que van desde la extrema derecha al anarquismo.

'Cataluña y terrorismo no es sólo 'Hipercor', 'Vic' y Ernest Lluch', ha señalado gráficamente Manrique, que ha apuntado que en Cataluña ha habido 23 organizaciones que han perpetrado atentados, por lo que esta comunidad 'es el lugar donde han actuado más bandas terroristas'.

Entre estas bandas figuran, por ejemplo, los Grupos Autónomos de Combate (GAC), el Ejército Popular Catalán (EPOCA), la Juventud Española en Pie (JEP), la Milicia Catalana (MC), las Brigadas Rojas (BR) o el Moviment Patriòtic Català (MPC), entre otros.

'Por suerte, muchos de estos grupos han cometido atentados que no han provocado muertos, pero sí han dejado heridos', ha señalado Manrique.

En el informe no se contabilizan los centenares de heridos que ha dejado el terrorismo en Cataluña, porque según Manrique aún es necesario bucear en las hemerotecas y en las sentencias judiciales para poder cuantificar con precisión el número exacto de damnificados.

Manrique, que tras el atentado de Hipercor ha dedicado su vida a defender los derechos de las víctimas del terrorismo, dirigió la Asociación de Víctimas del Terrorismo (ACT) en Cataluña hasta la escisión con la central, en 2002, cuando creó y dirigió la Asociación Catalana de Víctimas de Organizaciones Terroristas (ACVOT).

Hace tan sólo ocho meses, la entonces consellera de Justicia, Montserrat Tura, le ofreció pasar a coordinar el Servicio de Información y Orientación a las Víctimas del Terrorismo, el primero de carácter público que funciona en Cataluña, con la participación de la consellería de Justicia y el Colegio de Abogados de Barcelona.