14 mayo 2012 El Correo

14 mayo 2012

Congreso sobre Memoria y Convivencia

Las víctimas exigen a los etarras que reconozcan el daño causado

También reclaman que el pasado no caiga en el olvido tras relatar el sufrimiento que ha supuesto su "invisibilidad" en la sociedad vasca

Tres víctimas de ETA de épocas diferentes pero unidas por un mismo dolor han participado esta mañana en Bilbao en el Congreso sobre Memoria y Convivencia, donde han relatado el sufrimiento que ha supuesto su "invisibilidad" y han reclamado que el pasado no caiga en el olvido y que los terroristas reconozcan el daño causado.

Iñaki García, cuyo padre Juan Manuel García Cordero fue secuestrado y asesinado en San Sebastián en 1980 y una de las víctimas que ha participado en los encuentros con miembros de ETA acogidos a la 'vía Nanclares'; Joaquín Vidal, presidente de la asociación andaluza de víctimas del terrorismo y herido en el atentado cometido con un paquete cargado de explosivos contra la cárcel de Sevilla en 1991; y Carmen Hernández, viuda del concejal del PP Jesús María Pedrosa, asesinado por ETA en 2000, han participado en el panel titulado "Víctimas, testimonio y convivencia", moderado por el periodista Florencio Domínguez.

Iñaki García ha destacado que la memoria es incompatible con el odio, el resentimiento y la venganza y ha pedido que el pasado no se viva "como algo irrelevante". "Las víctimas del terrorismo nos recuerdan lo que ha pasado. Un pasado del que no nos sentimos orgullosos por la insensibilidad, invisibilidad y la desconsideración a veces extrema y humillante con las que en demasiados ocasiones se ha tratado a las víctimas del terrorismo", ha dicho.

A su juicio, la memoria pasa por conocer toda la verdad sobre los asesinatos de ETA que aún hoy quedan por esclarecer, así como sobre las "tropelías" impulsadas o toleradas por representantes del Estado de Derecho. "Es lógico y humanamente comprensible que familiares de personas muertas por acciones desproporcionadas de las fuerzas del orden público, en ocasiones de manera fatalmente accidental y en otras me temo que no tanto, quieran saber quien disparó, quién dio las órdenes y que responsabilidades tuvo cada cual", ha señalado.

Violencias equivalentes

No obstante, García ha querido dejar claro que "no han existido dos violencias equivalentes que haya que extirpar" y ha reivindicado que la memoria es el relato de todo lo sucedido. "Hablar hoy de memoria pasa también por reconocer que esas víctimas tiene derecho a conocer la verdad y que se haga justicia", ha subrayado. García ha abogado porque se recojan relatos "plurales" con la verdad y justicia y en los que se reconozca que el matar fue "inútil, un error y un horror"

Carmen Hernández, por su parte, ha relatado las amenazas y el acoso al que fue sometida su familia y cómo se enteró por los medios de comunicación del asesinato de su marido. "Se siente soledad ya que la gente parece acostumbrada a este tipo de situaciones sin que ello lleve a alterarles o afectarles. Sufrí mucho por esa pasividad de la gente, viendo que vecinos y personas con los que has crecido dejan de saludarte y empiezan a manifestarse debajo de casa", ha indicado.

Hernández, que ha explicado que para ella el perdón ha sido un acto de liberación, cree que hay "demasiada prisa por parte de algunos sectores por normalizar la situación" cuando, a su juicio, "hay que ir pasito a pasito porque ha sido una historia de muchos años de sufrimiento y reconducir odios, educar en valores y respetar al otro como persona llevará su tiempo".

"Justicia"

La viuda del concejal ha reclamado también "justicia" y ha instado a que se reconozcan todas las vulneraciones de derechos humanos "y que aún no se han llevado a cabo". Hernández ha relatado también su encuentro con un terrorista arrepentido y ha confiado en que todos los presos "pasen por este proceso de reflexión y arrepentimiento".

Por último, Joaquín Vidal ha explicado cómo funcionarios de prisiones tuvieron que proteger a los presos de ETA que se encontraban en la cárcel de Sevilla después de que un paquete bomba causara cuatro muerte y 60 heridos en el penal y ha hecho hincapié en la "generosidad tan grande" de las víctimas del terrorismo ya que "tuvimos que salvarles la vida, ellos que nos la habían quitado a nosotros". Vidal ha subrayado además que el terrorismo de ETA ha conllevado "miedo, horror, terror, desconfianza y muerte" y no ha conseguido nada "no ya para el pueblo, sino para ellos mismos que no sea exclusión y clandestinidad".

Tras insistir en que los terroristas deben reconocer su equivocación y arrepentimiento, Vidal ha insistido en que siempre estarán a lado de los defensores del Estado de Derecho a cuyas instituciones corresponde decidir "el punto final de la violencia si bien para ello exigimos el desarme total y absoluto de los violentos, su disolución, el reconocimiento del dolor causado y de los hechos perpetrados para que ningún acto violento quede impune". "El daño, dolor, sangre y muerte durante 50 años lo han sufrido las víctimas del terrorismo, por ello tendremos que crear un futuro donde la verdad, la justicia y la memoria a las víctimas impere por encima de los asesinos y la impunidad", ha concluido.