viernes, 13 de marzo de 2015

13 marzo 2015 (10.03.15) (2) eldiario.es

13 marzo 2015 (10.03.15)



Desde el 11M ha aumentado la capacidad de prevenir atentados, según fiscal










Once años después del 11M, España ha aumentado su capacidad de "prevención, visualización y control" del fenómeno terrorista de corte islamista, del que ahora se hace un constante seguimiento en internet, lo que también requiere de nuevas regulaciones legislativas, como la del "agente encubierto virtual".

Así lo expone en una entrevista a Efe la fiscal Dolores Delgado, coordinadora de asuntos de terrorismo yihadista en la Fiscalía de la Audiencia Nacional, que matiza no obstante que sería "temerario" pensar que un atentado como el 11M no puede volver a producirse.

"Todo puede producirse y todo puede darse, y lo que estamos haciendo es trabajar para que eso no se produzca. El terrorismo es mutante, cambiante, ha ido evolucionando. Lo que pasa es que nosotros también hemos evolucionado con él. Hemos aprendido mucho de lo que se hizo y de cómo se hizo".

Cuando se produjeron los atentados del 11 de marzo de 2004 en Madrid -explica Delgado-, España ya era "pionera en investigaciones de terrorismo yihadista" como la que se hizo a células del GIA aquí asentadas y "hay que reconocer que no se hicieron las cosas mal", teniendo en cuenta que la masacre del 11M fue perpetrada "en un ambiente internacional en el que se vinieron sucediendo este tipo de atentados".

Desde entonces, "lo que si hemos hecho es aumentar nuestra capacidad de prevención, de visualización, de control. Se ha capacitado mejor a la gente, se han otorgado más medios se han dedicado mayores esfuerzos a que eso no se produzca".
Y ahí es donde adquiere enorme importancia la figura del "agente encubierto en internet", que "está permanentemente, entre comillas, vulnerando derecho fundamentales".

Esto es, "interviniendo conversaciones en internet, utilizando un perfil que no es el nuestro, en grupos de redes sociales, interceptando comunicaciones que se están produciendo de una manera constante y diaria...", algo, observa la fiscal, que no está previsto en una ley que data de 1999 y que está enfocada "al agente encubierto para la delincuencia organizada".

Delgado cree necesario por tanto "pensar cómo es esta figura, cómo se puede desarrollar, cómo realizar un control y una seguridad para el agente encubierto, y también una seguridad para el que está siendo investigando". Y es que la ley que rige ahora "no prevé las situaciones nuevas que la tecnología ha brindado a las organizaciones terroristas, que operan en internet".

Para Delgado el pacto de Estado contra el terrorismo yihadista alcanzado entre el PP y el PSOE, recoge unas medidas muy amplias, siendo la más concreta la reforma de nuestro Código Penal, que ya "en materia de terrorismo es uno de los más avanzados del mundo".

Por eso echa en falta que se "focalice más en las técnicas, en las medidas de investigación" porque es "lo que más problemas nos genera" porque "acreditar una conducta requiere de una prueba y para obtener una prueba se necesita una técnica de investigación y esa técnica necesita una reforma procesal importante".

En esa reforma, la fiscal aboga también por revisar la ley de protección de testigos, que considera se ha quedado obsoleta a la hora de amparar a aquellos que pueden dar información clave para luchar contra este tipo de terrorismo.

"Nos estamos dando cuenta de que el entorno de nuevos operativos yihadistas que han sido reclutados tiene mucho miedo, y quisiera denunciar en ocasiones lo que está ocurriendo con sus hijos, mujeres, maridos, y no se atreven porque no tenemos las suficientes medidas de protección para garantizar la integridad y la libertad de estas personas", lamenta.

En estos momentos, el objetivo principal de los que luchan contra el terrorismo yihadista es frenar a la "manada" que alienta desde internet a los llamados lobos solitarios. Se trata de "gente que accede a una ideología desviada patógena, que en este caso es religiosa" y que lo hace "a través de herramientas comunes de adoctrinamiento" en internet, fundamentalmente redes sociales.

"Es verdad que son muy difíciles de detectar al final de la acción, pero lo que es más posible es neutralizarles en ese inicio de la actividad terrorista como es el adoctrinamiento, el reclutamiento y la captación. Son muchos los pasos, son muchos los actores, son muchas las acciones que intentamos realizar".

También dificulta la tarea el que estos lobos solitarios no tengan un perfil definido. Esto hace, según la fiscal, que la publicidad y el márquetin yihadista en internet se dirija tanto a jóvenes, como chicas, menores, mujeres y hombres maduros, aunque todos ellos tienen en común la "permeabilidad" o predisposición a recibir ese mensaje, son influenciables.
La fiscal relata que todo esto se traduce en "un trabajo continuo, constante y permanente" de "monitoreo" en internet en el que "a veces se detectan personas físicas y otras veces son perfiles virtuales que interactúan en las redes sociales", por lo que ya "se hace una labor preventiva al cerrar una página que tiene contenidos terroristas de enaltecimiento, colaboración o directamente integración".

Reconoce que cuando se cierra una de estas páginas al día siguiente "sale otra, sale otra y sale otra", pero al mismo tiempo los investigadores "vamos depurando más nuestras actividades" y aunque los yihadistas "tienen magníficos especialistas, tienen gente autodidacta, gente que pasa 20 horas delante del ordenador... también tenemos investigadores muy buenos que está ahí" para contrarrestar.


Pese a ello, Delgado advierte que eso "no significa que seamos infalibles". "Ahí están los atentados de París, que se pueden volver a producir, pero estamos trabajando para que no ocurra".

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